Orlando,..

Debo confesar mi pobre discurso,.., sensibilidad,..

humanidad que quisiera aspirar,..

Hacer una pobre mención hacia los caídos en Orlando,..

Quizás es debido a la pobreza de mi espíritu,..

que todavía teme,.., ¿por qué?,..

Y es que no alcanza a aceptar la diferencia,..

hipocresía,..

Esa la doble moral, el fallido discurso,..

vale con solo las palabras,.. ¿y con los hechos?,

acciones que dejan de tomarse,..

que se excluyen,.., indolentes,..

¿Qué más da?,.., no pertenezco,..

no puede defender a su causa,.., su vida,..,
su razón,.., su ser y su existir,..

a su amor,.., comprender,.., aceptar,.., permitir,..

¿Pues quién yo me creo?,..

poder ponderar el valor de una vida,..

valorar,..

este si hay que llorarle,..

este no,.., no se lo merece,..