que la persona infecta, inundada de desorden, de caos,
de “cosas” que nunca se hicieron, o dejaron de hacerse,
que resulta entonces, en nada de orden, antes lo contrario,
Quiere, desea poder elaborar ideas, teorías, o sistemas
que “buscan” ordenar el caos que persiste en toda la vida,…
la desigualdad y la justicia, por ejemplo,…
Algo recordar aquello que se decía de Marx,
que teniendo tantas carencias materiales,
casi viviendo en una miseria total, plena,
hablara el insigne individuo de la “riqueza”,
el capital, su obra cumbre y que su familia, sus hijas,…
prácticamente se morían porque el carecía de lo básico, lo esencial,…
siendo judío,…
Claro que entiendo que nada que ver,
no hay ningún comparativo que me valga,
pero si he notado ello,…
Esta carencia de orden, de “arreglo” de las cosas todas
y esta especie de “vehemencia” de “idear”, o “crear” un mundo ordenado,
según,…, en la mente, en teoría,….
Como si fuese una obsesión, un deseo grande
y gigante de hacerlo forzosamente,…
Quizás aunque uno deseara enterrar ese sueño o fantasía
que “nunca” sucedió, no fue lograda ni siquiera de cerca,…
esa carencia básica, sustancial, siempre queda,
como el caso de las “amputaciones” de miembros en el ser humano,
donde queda la “sensación” de su presencia,…
Y estas “fantasías”, “sueños”, podrían crear estas líneas,
letras, esa especie de anhelo que desea no morir del todo,…
busca evocarlo, pintarlo,…., al menos plantearlo,…
para no “extraviarlo” del todo y decirse a si mismo que el “existe”
al menos en idea, en anhelo, en deseo,…
Lejos del pragmatismo vil que establece solo de valor,
aquello tangible, concreto,…, real,…
Es no perder esa sensación “primera”
cuando leí la alegoría de la caverna y sentí
que mucho describía esa sensación cierta de algo
de alegría, de saber que quizás yo estaba con esa visión
fragmentada,…, “quebrada” o parcial acerca de todo,….
de las ideas, las percepciones,…, el orden, el desorden en “todo”,….
Quizás sin darme cuenta yo vendría a estar sumido allí,
en esa visión limitada,…, y “praxis” como decía Marx,…
“Ya basta de idear, filosofar acerca de,…, hay que transformarlo”,…
y los soñadores “necios”,…, no paramos de “crear” fantasías,…, utopías
inexistentes que no acaban nunca de concretizarse, realizarse,…
que “buscan” ordenar el caos que persiste en toda la vida,…
la desigualdad y la justicia, por ejemplo,…
Algo recordar aquello que se decía de Marx,
que teniendo tantas carencias materiales,
casi viviendo en una miseria total, plena,
hablara el insigne individuo de la “riqueza”,
el capital, su obra cumbre y que su familia, sus hijas,…
prácticamente se morían porque el carecía de lo básico, lo esencial,…
siendo judío,…
Claro que entiendo que nada que ver,
no hay ningún comparativo que me valga,
pero si he notado ello,…
Esta carencia de orden, de “arreglo” de las cosas todas
y esta especie de “vehemencia” de “idear”, o “crear” un mundo ordenado,
según,…, en la mente, en teoría,….
Como si fuese una obsesión, un deseo grande
y gigante de hacerlo forzosamente,…
Quizás aunque uno deseara enterrar ese sueño o fantasía
que “nunca” sucedió, no fue lograda ni siquiera de cerca,…
esa carencia básica, sustancial, siempre queda,
como el caso de las “amputaciones” de miembros en el ser humano,
donde queda la “sensación” de su presencia,…
Y estas “fantasías”, “sueños”, podrían crear estas líneas,
letras, esa especie de anhelo que desea no morir del todo,…
busca evocarlo, pintarlo,…., al menos plantearlo,…
para no “extraviarlo” del todo y decirse a si mismo que el “existe”
al menos en idea, en anhelo, en deseo,…
Lejos del pragmatismo vil que establece solo de valor,
aquello tangible, concreto,…, real,…
Es no perder esa sensación “primera”
cuando leí la alegoría de la caverna y sentí
que mucho describía esa sensación cierta de algo
de alegría, de saber que quizás yo estaba con esa visión
fragmentada,…, “quebrada” o parcial acerca de todo,….
de las ideas, las percepciones,…, el orden, el desorden en “todo”,….
Quizás sin darme cuenta yo vendría a estar sumido allí,
en esa visión limitada,…, y “praxis” como decía Marx,…
“Ya basta de idear, filosofar acerca de,…, hay que transformarlo”,…
y los soñadores “necios”,…, no paramos de “crear” fantasías,…, utopías
inexistentes que no acaban nunca de concretizarse, realizarse,…
