y no estés jorobando,…
y creo tendría algo de razón, lo concedo,…
pero decirlo “algo” me alivia,…, me suaviza el estado,…
por eso lo hago,…, escribir, expresar,…
Me encantan las analogías,…
las historias que se entreveran, que se enredan,..
me “permiten” tocar distintas cosas, estados, percepciones,…
por ejemplo,…, la analogía del árbol,…, me ayuda mucho,…
Y estaba el viejo roble,…, añoso,…, demasiado cansado de vivir, de ser,…
y de haber visto demasiado (sabe demasiado),…
Cosas buenas y bellas,…
el abrazo hermoso de dos niños pequeños,…
o un corazón elaborado,
con tanto amor por aquel joven,…
“Luana, te quiero tanto y nunca te he de olvidar”,…
Demasiados pajarillos que se asentaron desde su nacimiento,
desde su creación en un ovoide receptáculo,..
Nacer,…, emerger a la vida,…, pio, pio, pio,…
y la madre amorosa florecer su amor y entregar esa pequeña
lombricilla en trozos para sus pequeños,..
nada era más importante en el mundo que ese gesto,.., esa acción,..
Tantas promesas que se hicieron en febriles noches
y abrazos intensos de los enamorados,…, le toco ver,…, percibir,..
Pero ya ahora sus ramas crujen demasiado,…, se resquebrajan y se
rompen con suma facilidad,…
Y la gente ya dice: “ha de estar ya enfermo
el viejo roble, ya sus ramas se secaron y adquirieron otro color,…, otro tono”,…
“¿Será la lluvia que hoy es escasa,…, será la plaga o la falta de nutrientes,…
que será?”,…
Y quizás no es nada de eso,…
sino es que se cansó,…, de:
tanto esperar,…
Que el amor fructificase,…
que la rosa Noelia,.., no se perdiese,…
que la luz de unos ojos bellos, no se apagase,…
y que la esperanza igual,…, no se terminara,…
que la duda y la incertidumbre no hiciera eco en algún corazón,..
Ahhh, fueron demasiados reveses que el ¿corazón?,…
(¿los arboles tienen corazón?, ¿quién lo hubiera creído?,…)
Vaya que lo tienen,…, sensible, tierno delicado y frágil,…
vaya que sí,…
Si cantaran a su derredor lo sabrían,…
si lo abrazaran sin nada decir o mediar, lo sentirían, …
como se alegran sus hojas y un murmullo pareciera salir,…
No lo corten, no lo mochen,…, no lo rompan, no lo fracturen,…
no lo borren del planeta,…, y por favor, no lo quemen,…
por piedad,…, ¡dejadle vivir!,…
