Voy remontándome encima
mío,..
evadiendo el
tiempo y la consciencia,..
Los recuerdos, los
balances,..
los hechos
cristalizados,..
que se yerguen
como gigantes,..
tienen vida
propia, contorno, densidad,..
hablan su propio
idioma, su mensaje,..
sus creencias, sus
apetitos, sus verdades,..
sus pasiones,..
Tan sólo observo
ese pulsar,..
ese devenir de los
tiempos,..
avatares,…
Me doy cuenta
que,..
tan sólo fui una
puerta,..
en la presencia de
dos universos,..
Lo que me antecede
y el futuro,..
ese que no me
pertenece,..
que nunca será
mío,..
habré quizás de
vislumbrarlo tan sólo,..
Clamo a todas las
constelaciones,..
para que sea lumínico,..
que no obscuro,..
ese que yo
padecí,..
la negra noche,..
Los silencios,..
los fantasmas de
mi infancia,..
Por ello la búsqueda
incesante,..
remontar del
tiempo,..
buscar de la
esperanza,..
correr en camino
de la fe,..
de la creencia del
ser supremo,..
el postrarme,..
Rendir a mi
verdad,..
esa que me guio
por toda vida,..
que me sedujo,..,
se hizo mía,..
Dar cuenta de la
filigrana engañosa,..
de las pasiones
tortuosas,..
esclavizantes,..,
enajenantes,..
someterme,..
plenamente,..,
someterme,..
abducirme,..
elevarme,..,
volar,..
sobre mis
miserias,..
sobre mis
lagrimas, mi acariciada soledad,..
sobre mis magros
hechos,..
mi desamor,..