viernes, 21 de junio de 2019

Y renacerá el amor,…


Posible, quizás una mañana,…, él o ella recordaran,..
ese tañer de campanas,…, ese murmullo muy quedito en el silencio,…, o su voz,..
su mirada enamorada,…, tan brillante y su sonrisa,…, que le acompaña,…

Quizás apenas en el último instante, él o ella,.., recordaran,.., sentirán,…
como se eriza la piel cuando recuerda,.., “eres mía,.., no te ausentes nunca”,…
déjame poseerte,.., una vez más,…, con solo vaho deseo acariciarte,…

En el sol de la viña de tus recuerdos,…, todo está intacto,…, nítido,.., claro,..
ello se percibe,.., nunca se pierde,…, y la flor, la guirnalda, ellas no se marchitan,…
ellas no se mueren,…, nunca,.., ni el amor,…

¿La amaste?,.., como si fuera el aire necesario para mi vida,…
nunca olvide su sonrisa,…, ni el brillo de sus ojos,.., y los relámpagos
que me alucinaban,.., en la intimidad,…, en la lluvia de pasiones encendidas,..
y el pausar,…, el descanso solo para poder retomar,…

Y parecieran solo milisegundos que ellos persisten, están,…
tan presentes,…, conmigo ellos son,..
y en el arco suave de mis años,…
mi mirada ella, no se agota en el horizonte de esos años,..
no claudica,.., ella no muere,…, no abandona,…
ella, se queda allí,….



Cuídate,..


Ello era cierto,..
que en la duna de tus ojos,…, acaso me dormía,..
y asentía,.., el mundo, sus placeres, sus placidos espacios,…

Yo no sabía de obscuros,.., de luces marginales,.., limites,..
que me decían,.., aquí no puedes estar,…, mirar,.., tocar,…
yo no lo sabía,…, solo sé que te amaba,.., te deseaba,.., te quería,..

Y tantas veces tuve que ausentarme forzosamente,…
pero luego siempre he estado a un milímetro de tus ojos,…
y de tus reclamos de mi para ti,.., han existido siempre,…

Y mira que nada nos dijimos,.., nada nos comprometimos,..
pero siempre hemos estado tan cerca,..
y hoy te veía en mis sueños,…, te vi tan macerada,.., afectada,..
ansiosa,.., llorosa,.., dolida,…
queriendo atrapar quizás la luna,.., subiéndote por una barda,..
casi que te caías,…

Cuídate,…, bella,.., ya no estoy nada cerca,…, amate mucho,…
procúrate,…, se cálida contigo misma,…, no exijas amor,.., sabiduría
de aquellos que no saben ni su nombre,…

Te sueño,…, te tengo en ellos,…, amate por favor,…, bella, cuídate,…



Sobre los ojos,..


Sobre el humo de tus ojos diagonales,…
se asoma la asombrada duda,..
la desconfianza, que no logra alejarse, esa duda
esa incertidumbre de lo bueno que ello proceda,
después de la tormenta,.., del caos,…
que ello pareciera para el ser humano,..

Y acaso es en el profundo azul de tus ovales ojos,..
en que mi alegre solaz él se detenía,..
para poder contemplarles,.., y gozaba,.., él amaba,..

Esa sirena Desire quizás posible tu nombre,.., tu llamado,..
y que yo evocara desde todos mis sueños de todas mis vida y tiempos,..
marginales,…

El ojo es la ventana de las almas,…, allí se puede ver,..
ella se percibe,..

Toda alma, todo ser, el más pequeño que posea unos ojos,..
tiene esas notables ventanas,.., que denotan,…
amor, confianza,.., miedo, terror,.., angustia,.., o pesar,…

Que ello posible ligue con su postura,.., de su cara,.., de su cuerpo,..
su caminar, de paso lento o pausado, agil,.., o diligente,..

Es solo en esa ventana que se puede “ligar” ese precepto,..
la percepción aproximada del alma,…, de su anhelo, su deseo,..
su querer y su amor,…, que pretende,…

Hay quien puede enamorarse de otras partes,…
pero yo me ligo principalmente de los ojos,…, y no sé porque,..
será que yo solo veía estos mismos,…, en los ojos de mi madre,..

Y en otros seres cercanos que empataban sus dichos,.., con sus ojos,..
podía leerles,…, sentirles con bastante nitidez, así sus gestos,…
prácticamente todo,.., ellos no me mentían,..
mas bien traducían,.., claramente,…

Y así me enamore de dos estrellas que podía ver en cada una
de las mujeres,.., que trazaron ellas mi vida,..