lunes, 17 de febrero de 2020

Renuncia,..


Podemos ser tan delicados,…, en verdad, ¿podremos?,…
no endurecer ni tan siquiera a las aguas,..
convertirlas a ellas en hielo,…

Podemos acaso ¿renunciar a la derrota que siempre ella nos inquina,…
si, podremos?,…

Y ¿podemos sonreír con apenas hierro, esperanza,.., podremos?
acaso dilucidar con una marmota, acerca del corta-fuego,…
que no nos inunde,…, que viralice tu sino, tu estrella no la lastime,.., podemos?,..

Y ¿podemos renunciar a la sensible derrota que nos impone la meritocracia,…
el tener que perfilarnos,…, podremos?,…

Ahora yo ya no lo sé,…, ¿pero, acaso realmente ello importa?,…



Carentes,...


He allí que solo somos “pretensos”,…, deseos, anhelos
de tantas cosas, sueños, deseos,…
hemos carecido de tanto,…, tenemos hambre de todo,…

De caricias, de besos,…, de comprensión,…
de una lagrima pequeña,…

Hemos ilusionado tanto,…, con atardeceres placidos,…
solariegos y romances,…
y de una benigna fe y no abyecta,…, plasmada de exigencias,
de milagros,…

Es una cadena llena de hirsutas falencias,…
huecos insondables,…, repletos,…

Quisiera darte alguna especie de explicación,…, de razones,…
pretextos,…

Es la inercia que poseemos los carentes,…, los pobres,…
los sin sueños,…

Créeme pequeña,…, todos aun así te queremos,…
algo que quede plasmado en estas letras,…, para tu porvenir,…
ojala le leas,..

O se formule,…, un cierto éter que pueda envolverte,…
cubrirte,…, de algo de resignación y aceptación de estos carentes,…
carecidos de substancia que así somos,..
que hemos sido,…

Y como ¿para que?,…, preguntaras,…
para que puedas caminar
con algo de paz,…, tan solo eso,…



Ripiante,...


Pudiera estar parado encima de hombros de gigantes,….
mi estirpe,…, mi gloria,…, mi herencia no devengada,…, ella gratuita,…

Iconos no formulados creados por mi no fueron,…

Tan solo las definiciones,…
son “chaparritos”,…, hablan un cierto lenguaje,…
creen estas leyendas, pasajes,…, son rupestres,…, incultos,…

Aunque muchas definiciones e indefiniciones,….
ellas me alejaran,…
de la fuerza que se crea como un puño,…
cuando se esta cerca de la unidad
que se liga, que se junta y se compromete,…

Se crean las “mentiras”, las ilusiones conjuntas que todos asimilan,…
que nadie cuestiona,…

El caballo era azul,…, el era un Nigromante,…
o un ciego,…, un mudo y sordo,…, le faltaba un ojo,…
verdad,…, amor,…, carecía,…

Y yo aquí buscando algo definir en esta cuasi “insulsa”,.., insalobre
permanencia,…
que ni siquiera alcanzo a delimitar que es lo que real busco,…
no logro formular la pregunta,…

Y este afán que me incita, me impulsa a
buscarle, como un pescador de palabras que tira sus redes,…
para poder algo extirpar esta rara sensación de mi sistema,…
que me da vueltas constante, constante,…, ohh,…