Alma mía,..
corazón solar,..
Tu, a alguien ¿perteneces?,..
¿algo te
contiene?,..
es que el viento
que sopla desde los linderos,..
de las fronteras
todas,..
no es posible
enlatar,..
Alma mía,..
libre eres para
volar,..
Yo mismo no te
sujeto,..
no hay una cuerda
que te enlace,..
que te forcé a
estar o permanecer,..
he visto el
rosedal que te reclama,..
la verdad y la
mentira en el umbral,..
de tu esencia
pertinaz,..
Los amores
prometidos,..
los no resueltos,…
las voces que te
llaman, solicitan,..
que te detengas,
no camines ya más,..
Y sin embargo
siempre, siempre,..
alejándote vas,…
Suave, muy tenue,..,
como fantasma,..
trasmigrar,…
No perteneces a
entelequias,..
seres supuestos,
no acabados,..
anhelantes,
suplicantes,..
acrisolados o en
proceso de,..
siempre caminas,…
vas y vas,…
Tan sólo
armonizas,..
por frugal
momento,..
un instante, un
segundo eterno,..
con una voz,..
unos amorosos
ojos,..
un abrazo,..
un poema, una
canción,..
Luego ya serena,..
prosigues y te
vas,..
Alma mía,..
¿podrías
permanecer un poco más?,…
en algún
espacio,..
un jardín,..
de colores y
fragancias,..
de sonidos
bellos,..
y miradas,..
te acarician,…
y te claman,..
vuelve ya,..