martes, 10 de julio de 2018

Una imploración,..


¿Y en el bando dormido,.., pueda anidar el verso, una palestra?,..
aquella que ha de servir para pintar un universo paralelo,..
una distensión o distorsión del tiempo-espacio, cuántico,..
y que solo existe en mi estado más sublime,.., el más puro,.., casi loco,..

Y donde el alma suele ella vagar,..
y ella se suelta,.., se inquieta,.., que a su dosel implora,..

Y que no requiere de casi nada de promesas, y de argumentos que le exijan,..
para reclamar un sublime y dulce verso,..

E igual poder decir,..
hoy me agoto,.., hoy me duermo,.., y estoy tan cansado,.., derrotado,..
que no atino a nada decir,.., y a exponer denuedo,..

Y acaso el sol, él se durmiese en su fragua,..
y el trino pájaro él también se durmiese,..
en una almohada, en un rellano,..

Y que reabastezca los cantaros de agua limpia y fresca,
que pueda ella convertirse en vino,..
por una plegaria,.., y una solicitud gozosa,..

Como llorar entre tu pelo y balbucear palabras necesarias,..
vitales,..
te quiero,.., te quiero,.., no te vayas,.., no desparezcas nunca,..