Hoy quisiera
llenar,.., ese espacio ciego, mudo y quieto,…
que en
lontananza me conduce a observar el vasto infinito,..
para otear en
el espacio desierto y buscarte,.., si quisiera,..
Y en el acendrado
espacio el viento susurra un tanto,..
perlea el
manto cielo,.., y acaso llora,.., y se detiene,..
Y quieto él se
queda y solo yo transmito esta congoja infinita,..
en él, solo es
el tiempo el que me percibe, que me da vida, presencia,..
voz, canto,
risa y llanto,..
Y me recuerda
que hay peleas que se deben dar sobre la orilla del solitario viento,..
afuera de la
luz y de promesas huecas,.., vacías,.., inertes,.., inexpresivas,..
allí donde
puede expelerse,.., la vena más profunda,..
la que en
momentos sublimes,..
emitimos,..,
espetamos,..
Donde las
palabras sobran,.. y los segundos parecen eternos,..
una
mirada,.., tu silencio,..
tiernos,..,
comprensivos,.., se abren los portales,..
una miríada de
promesas sutiles,..
y mi
duda,.., ¿será?,.., ¿será?,..
quizás,.., quizás,..