martes, 15 de agosto de 2023

Invictus,...

En verdad que no importa,…, tener alguna razón,…
contar con alguna versión, distinta,…
o entender las “cosas” solo a cierto tiempo,…
y parciales, no totales,..

Adherirse a ciertas cosas, verdades, o recuerdos,…
“fallas”,…, del paisaje,…, de la matrix,…

No importan tanto,…, para erigirse por encima del otro,…

Dominarlo o conquistarlo,…
hacer cirugía del corazón o del alma,…, del cerebro,…
nada,…, eso a nadie pertenece,…

“Dejad hacer, dejad crear,…, creer,…, sufrir,…
sentir”,…

Habremos pasado raudos al olvido, sin dudar,…
en verdad,…, ¿por qué entonces preocuparse u ocuparse?,…
solo fluye como el agua,…, dejad que los ríos fluyan
con libertad,…, creed,.., esperad,…



Versar,...

¿Es que acaso un sonar, pudiera ser de metal,…, blanco, impoluto,..
pudiera ser?,…

¿Cuántas preguntas se habrán emitido ellas, y sin contestar?,…
la rosa de los vientos,…, Trafalgar,…, un penar,…
y la sonrisa cálida de los niños, ellos que habitan en mi memoria,…

Cuantos lenguajes ellos hoy hablan y no se comunican,…
pareciera hablan sefardí, yidis, rumano, veneciano,…, mexicano,…
español,…, todos juntos,….
tantas derogaciones, tantas inflexiones, plexos solar acunando
estrellas, almas, corazones y disensos,…, también,…

Tu libertad me estorba,…, tu palabra no entiendo,.., tu querer me es ajeno,…
y tu desear no es mi desear,…, yo no me entusiasmo con tus cosas,…
y nunca tendré tus colores, sensaciones,…, no escuchare tus silencios,…
¿verdad, mentira es?,…, siempre la duda,…

¿Por qué será tan complicado, vivir,…, amar, comprender?,…

Ah,…, dormiré por un rato (un año o mil),…
a ver si se aclara el universo,…, o mi pensar,…
y mi sonar,…



Nada es para siempre,…

Inclusive, la más bella sonrisa,
la mirada más clara y transparente,
igual ella se agota,…

Y acaso tan solo nos quedan, unos bellos “recuerdos”,
y una sensible sonrisa y una nostalgia,…
y en la liturgia aquella (conjunto de prácticas establecidas que
regulan en cada religión el culto y las ceremonias religiosas),
de los años, de las décadas, o las centurias,…
apenas “alguien” las tomara o evocara,…

Somos pues así,…, seres apenas así, “evocados”, recordados,..
“dispersos” muchas veces,…, volátiles,…, y no transfigurados,…
y por ello debemos pues, “dejar pasar”,…
no “aferrarse” a los mitos o fetiches,…
la vida es tan amplia, que no vale la pena el quedarse “estacionado”,
fijado, como clavado en una estaca,…

¿Llorar?, claro, vale la pena,…
el dulce penar que nos reduce,…
pues somos criaturas en verdad,..
y no robots, no cibors,…

Pero aun el dolor, debe dejarse pasar,…
“lo que paso, paso y lo que no paso no paso”,…

Hay que digerir esta ley y este ocaso,…
sacudirnos un tanto,.., y dar pie y crédito a la vitalidad
de nuestra alma,…
confiar plenamente en la fuerza motora del universo,..
y dejarse conducir por ella, sin oponer casi resistencia,…

En verdad: “nada es para siempre”,…, todo pasa, todo se abrevia,…
por favor, no “fijemos” nada,….
cambiemos, evolucionemos, ¿hacia dónde?,…
no sabemos sino hasta ya transitar,…