Y aquí voy,.., hacia ninguna parte,..
pareciera que nada me conduce,..
nada me conmueve o me lleva,..
y voy eslabonando los recuerdos,..
palabras,.., voces y promesas, algunos sueños,..
Frágiles son los momentos,..
el marco del dintel donde puedo encontrarme aquí,..
ahora,.., mañana,..
Los amores abandonados,..
los todavía no encontrados,..
la vida,.., la enfermedad o la muerte,..
la historia,..
Ay de mi,.., de mi serena calma,..
que mueve lentamente mi barcaza,..
que me lleva y me remonta,..
en este mar de la vida,..
que como es,..
inquieta, contradictoria,…
en leves momentos bella,..
en muchos quieta,.., indolente,..
o con dolor por una pena,..
por algo que constriñe a mi espíritu,..
donde solo Dios puede rescatarme,..
donde puedo yo convertirme al perdón y la sumisión
de mi cerviz,.., altiva,.., orgullosa,.., herida,..
Donde no entrasen los ritos,..
las categorizaciones o dependencias exigentes,..
Lo bueno y lo malo,.., no se distancian del ser humano,..
es solo así,.., amplio, inclusive,..
la candidez,..
el orgullo y la soberbia,..
la vanidad y que nos nubla,..
y la razón que no,.., no nos asiste,..
por el dolor de no sentirla,..
Es muy suave y cálida la mentira,..
la asumida o la creída,..
Caminare sobre mis pasos,..
en el sendero de las estrellas rutilantes,..
en el Armagedón que me aterroriza,..
hacia el polvo de estrellas
que habré de convertirme,..
Y un suspiro,..
una hermosa lagrima,..
vertida y sentida por un solo ser,..
que pueda quererme,..
y me abrigara en su recuerdo y corazón,..
y podrá llevarme consigo,..