martes, 18 de febrero de 2020

Fuimos,..


¿Qué es el hombre?,…, acaso tan solo un suspiro en el viento,…
quizás una cebolla infinita,…, una alcachofa,…

Eones de distancia, entre el pensar y el temer,…
los “valores” que apenas se elucidan,…, se delinean apenas,…
ellos se agotan,…, no logran ellos definirse,…

Cuándo comprenderemos acerca de los tiempos, de los portales,…
que ellos convergen, en infinitésimo instante,…, que apenas les percibimos
como un atisbo que nos incendia desde cierto lugar, desde adentro,..

Quizás remoto,…, quizás escuálido,..
cuando se formulo alguna pregunta, o duda,…
inquietante,…, pesarosa o siniestra,…, evocante,…

Oh,…, cada día que pasa,…, sobre este sinuoso pensar dilucidante,…
veo que ya fuimos personajes que existieron alguna vez y hoy ya no,..

Realmente somos, ¿fuimos?,…, como fantasmas,…, traslucidos,…
sin esencia,…, sin raíz y sin cuerpo,…, oh,…,¿“fuimos”?,…
¿acaso fuimos?,…



Monstruos,…


Habría que encerrar a los monstruos, en un santuario,…
y colocarles cadenas, gruesas, muy fuertes,…
para que ya no más se salieran de su sarcófago,…

Que no más se temiera,…, pero esa figura ella es,…
un imposible,…, pues estos personajes,….
les llevamos,…, arropamos,…, están apenas a un parsec
de crearlos,…, de darles vida y cuerpo,…

No hay remedios mágicos,…, anatemas,…, plegarias,…
que nos libren,…, solo aceptarles,…, no reducirles,…

Ellas se subieron a nuestro vehículo,…, por casi siempre,…
nos habitan,…, oh pesadumbre plena del alma humana,…
hay que aceptarle,…, saberle,…, si,…