sábado, 17 de abril de 2021

Amor,...

Ay amor como me llenas,…
me invades y sin yo haberlo merecido,…
no hice nada para ello,…
no fui sometido a comprar un ticket,…
no tuve que hacer una gran fila,…
no me lo gane,…
solo me di yo cuenta,…

Que el amor que yo buscaba en nadie estaba,..
sino solo en mí,…, radicaba,…
nadie me lo dio,.., nadie me lo quito,…

No requiero de “cosas”, de poder,…, o de conocimiento,..
suave,.., profundo,.., de agentes “químicos”, de fetiches,..
de aleluyas,.., de mantras,…, de tabús,…, de mentiras o verdades
a medias,…

Puedo yo creerlo o no,…, pues poseo libre albedrío,…
para ser tan cruel o despiadado conmigo mismo,...
y consecuentemente con todos los demás,..

El amor es como una semilla que en mi esta,…
todo es que no la pierda de vista,…, de noción de su existencia,…
allí esta,…

Pudiera estar “encarcelada” detrás de,…
mil candados o una gran cárcel,.., detrás de un gran dolor,…
¿por qué?,…

Porque alguien me mintió,.., “alguien” me hizo daño,…
pues no me amo,…, no fue mía,…, ella no quiso,…
no creyó en mi,….

Vaya, al fin criatura incompleta el humano es,…
sea por Dios,…, así somos,…, tan falantes,…



Similar,...

Caray,…, ¿cómo somos los humanos?,…
decimos tener, a ratos, amor, un apego a las mascotas,…
a los gatos, a los perros,…, y,…

No podemos soportar, tolerar a nuestro par,…
nuestro espejo,…, pues prácticamente lo “calcinamos”,…
lo “quemamos” en leña verde,.., ¿por qué?,…

Y nos justificamos, es que así debía de ser,…
“no se lo merecía” o si, se merecía nuestro desdén
nuestro desprecio o denostación,…, nuestra “sabia” calificación,..

Y al hacerlo así,…, NOS DESCALIFICAMOS sensiblemente
nosotros,…, en automático,…
pues nuestro par, nuestro congénere,…
aquel que convive conmigo a diario, o eventualmente,…
es similar a mí,…, a lo que yo creo y fabrico,..

Son “mis relaciones”, son mis “contactos”,…
son mis pares que me toleran y soportan igual ellos a mí,..
que igual ellos me descalifican algo similar,…
y claro que no podría culparlos,..
pues,…, soy tan “malo” o bueno como ellos se perciben,…
de manera similar,…, igual,..

Y al tener esta óptica,…, tan mal,…, nos erigimos jueces,…
terribles, que Atila o cualquier dictador nos queda “chiquito”,….

Debemos pues,…, tolerarnos,…
pues, somos TODOS,…, tan incompletos,…, tan errados,…
tan equivocados,…, tan febriles,…, tan tontos,..
tan creídos,…, tan “ego”, tan acomplejados,…, tan incompletos,..

Que siempre, o casi siempre,…
debíamos darnos el beneficio de la duda,.., antes de,..
sacar conclusiones,…, de dar nuestro veredicto
o testimonio final,…, o calificación,…
a nuestro par,…, a nuestro congénere,…
a nuestro vecino, o colaborador, o amigo,…, o socio,…
hermano, hermana,…, esposo o esposa o hijo
o quien sea,…

DEBEMOS PUES TOLERAR,..
nuestras equivocaciones, nuestros errores,…
nuestras fallas o “boludeces”,…
nuestras pretensiones,…, o nuestros fallidos intentos,…
en alcanzar esa estrella,…

Pues al final somos “criaturas” imperfectas,…
y lo seremos siempre,…

Pero en ese ser “pequeño”, incompleto,…
crédulo,..
puede tener un ápice de fe, de amor,…, de comprensión,
de compasión,.., de capacidad de perdonar o de crecer o de estudiar,..
de esforzarse, una vez,…, otra,…

Y darle una dimensión extraordinaria a su vida,..
o no,…, si no quiere,…

Debemos pues amar a nuestro par,…, a pesar de,…
TODO,…
ya,..