saber que el “mal”, el engendro,…
no es un ser mítico, legendario, aberrante,..
que nos han contado, platicado,..
Son nuestros hechos y sentimientos que ellos nos apartan,..
que nos separan del rebaño humano con tremendas justificaciones,...
No deseamos “comprender”, no auditamos a nuestra alma,…
a nuestros sentimientos,…, y al perdón no damos ninguna cabida,…
no “transigimos” ni un ápice con ella,…, con esa posibilidad,…
No deseamos comprender que el humano siempre “falla”,…
siempre adolece de cantidad de errores, sentimientos y actitudes malsanas,…
Cristiano tuviera que ser, “escuchar” y seguir las enseñanzas,…
del maestro,..
¿“alguien” te ofendió?,…, ofrece la otra mejilla,…
¿es fácil?,…, para nada,…, deseamos llevarle justificadamente al patíbulo
sin escalas,…, sin nada de argumentos o defensas,…
¿es culpable?,…, merece la “horca” cuando menos,…
o el silencio, o borrarle del libro de la vida, y a todo su ejemplo,…
sus consecuencias,…, su “karma”,…y quizás solo así,…
quizás, podríamos perdonarle,…
y no hay garantías de que suceda,…
¿Es posible “borrar” el tiempo, los hechos y palabras?,…
absorber todos los golpes, injustos ellos,…
¿y poder ver todos los considerandos?,…
¿y además tener “sabiduría”,…, deferencia, clemencia a tiempo,..
comprensión,…, unas palabras concurrentes, recurrentes?,…
¿un abrazo y un clamor en silencio?,…
¿una dadiva no pecuniaria?,..
¿un real interés en rebasar los límites mundanos,..
lo que la lógica domina, nos exige?,…
Si, habría que derribar cantidad de muros, una vez,…
muchas, demasiadas veces,…, ¿cuántas?,…
70 veces 7,…
