viernes, 30 de julio de 2021

¿Se acabará, algún día el miedo?,…

El temor, la duda, la incertidumbre, ¿dejaran de existir?, el hombre, el ser humano, desearíamos que si,…, una muy alta pretensión,…, pero realísticamente esto parece totalmente ajeno a la realidad, a la verdad,…, no hay una forma racional, lógica, cien por ciento segura, de terminarlo, de erradicar esto mismo, el “error”, la duda, la impredecibilidad es lo que redundara,…, imposible extrapolar todas las variables (¿todas?) y “garantizar” una respuesta, un cierto hallazgo o fin o logro totalmente al 100.00000%, pues siempre habrá ¿un margen de error?, los imponderables que no se habían considerado,…, “¿me quieres?”, respuesta no esperada: NO,…, “¿me crees?”,…., también, “NO, no te creo”,…, los seres humanos en gran medida somos “ciegos” ante demasiadas “cosas, objetos”, la realidad o la percepción de los otros, sus temores y sus creencias,…, sus apegos, o sus miedos,.., hacia nosotros mismos, lo más grave,…, casi nunca hay una certera evaluación objetiva, “justa” de nosotros,…, traemos demasiadas “rémoras” del pasado: “eres malo, eres incompetente, un misógino, un looser, un egocéntrico,…, te falta caridad”,…, etc, etc, y lo hemos creído, lo “asimilamos”, lo admitimos y aceptamos, ¿por qué?,…, ¿por brutos, por condicionamiento, porque la etiqueta nos la coloco “alguien” especial, un padre, una madre,…, alguien “querido”?,… ante tal maremágnum de “argumentos” (ilógicos, triviales, superficiales, denostantes, segregantes), a veces, los más cínicos o derrotados, nos reímos como tontos,…, y “asumimos”,…, “SI,…., lo soy,…, soy así, ¿y qué?”,…., “¿me vas a salvar de ello, de mi desventura?”, y a veces, el “criticante” dice “si, te voy a salvar”,…, vaya cosa, el “sensei” y su “alumno”, el maestro no puede ni siquiera abrocharse los zapatos,…, no ha “resuelto” sus cosas,…, su vida,…, ni sus cuentas,…

El “miedo” pues, la incertidumbre, creo, nunca se acabara,…, ella siempre habrá de estar, es parte univoca del universo,…, de la vida,…, el ser humano no llegamos a “predecir” el futuro,…, a duras penas lo que va al momento (y no todo, solo porciones), debemos creo, aprender con ese pequeño “salto” en el corazón, en el alma,…, esa “inestabilidad” cuasi permanente,…, intima, que poseemos y que no se va por más que queramos (angustia alguien establece), la “pretensión” del humano es “controlar” o someter esta duda o miedo y buscan de todo para lograrlo: leer libros, “fugarse” de mil maneras: sexo, imaginación (delucion), un vicio o muchos, trabajar en exceso, burlarse de todo, hacer obras de caridad, limpiar la casa, joder al prójimo, etc, etc., una fe, una religión, un apego, una dependencia,…, van a hacernos el “milagro”, tendre “certeza”, asertividad, ya no me equivocaré como “siempre”,…

Ah,…, da algo de pena el humano,.., algún día escribí el “ángel caído”, lo cual debe igualarse: ángel caído = ser humano, porque su ser espiritual le llama a las estrellas,…, a lo “trascendente”, pero sus apetitos y sus miedos,…, le avasallan, lo hacen “cachitos”,…, lo tiranizan y someten de mil maneras,…, por sus instintos, sus malos habitos,…

El “miedo” creo, nunca se ira de nosotros,…, sugeridamente,…, hay que convivir con el hasta el fin, decía en algún pasaje, “estimado, si llego al cielo,…, será porque vengo huyendo del infierno”,…

De acuerdo estoy,…, abrazos,…