Muy cierto que me recuerda, de rato en rato,..
esta miseria de gato,.., o de perro,.., digamos pobre,..
depauperizado,.., aquel que tiene que mirar con los ojos tristes
para que le avienten algo,.., comida,.., unas palabras,.., algo de
cariño,..
Y eso es falso,.., como un hada con pañales,.., jajaja,..
se hizo la figura,.., sorry,..
Pero lejos del desliz,.., es cierto,.., no somos mendigos
(con acento y sin acento, por si hubiera duda),..
pero tampoco somos,..
altos personajes o prelados importantes,..
Quizás debemos los de nuestra especie,..
ser un poco más dignos,..
no demasiado,.., pero si dignos,..
Darnos cuenta que merecemos más allá que una triste dadiva,..
que una forzada sonrisa,..
un real sentir más que un falso buenos días,..
Preferible la verdad siempre, siempre,..
aquella, la que prodigamos,.., o la que deseamos creer,
apegarnos como un gato (a veinte uñas sabe),..
Darnos un tanto la justa realidad de nuestro saber y valer,..
no somos tontos al cien (nadie lo es aunque puede fingirse muy bien),..
tampoco somos ingenuos al cien,..
si nos ven la cara,.., es porque queremos que así pase,..
que nos gustan las mentiras,.., los alucines,…
Ya,.., no quiero “aguitarlos” en estas fechas decembrinas,..
solo demonos una tregua,.., valemos por nosotros mismos,..
solo eso es la sintética verdad,.., yo así lo considero,..
¡Felicidades!,…
