sábado, 8 de octubre de 2022

Tener miedo,…

No es pecado,.., es algo “natural”, “normal” digamos,…
debíamos tener miedo, de no tener miedo,…
de pensarnos, de creernos,…, solventes, completos, enteros,…
“sabios”, con la respuesta amplia, muy sólida, sin dudar,…

Y ello ha sido lo más grave, lo más severo,..
las peores atrocidades y resoluciones en la historia,..
han venido de la mano de este enorme “arrojo”,…
de creerse completos, íntegros, como el granito,..
sin fisuras, sin pliegues, sin partes obscuras o abigarradas,…

La duda, el miedo,…, nos remite a nuestra condición de criaturas,..
pues lo somos,…, solo criaturas,…, solo criaturas,…

“Teme la criatura de su respirar,…, de su dormir,…
de su sueño que ha de acompasar,…, de la luna, de la noche,…
de la incertidumbre, esta teme”,…

Teme la criatura de su andar, de su errar, de sus pensamientos,.., teme,..
del vértigo de la verdad, de la gran mentira que puede apostar,..
quisiera tener certeza, solvencia, predicibilidad,…
pero esta se va, se escabulle,…, se escapa como agua entre los dedos,..
no la fija, no la conquista y teme,…

Y busca la criatura a “alguien”, “algo”,…
que le asegure, las cosas, los objetos,.., que dirima la duda, el temor,..
y no falta el berraco,.., tremendo,.., “iluso” o perverso que asegure,..

“Yo te he de proteger, yo te cuidare,…, y siempre”,…

Solo para saber, al cabo de los años,.., de los hechos,…
que no es así,…, “nadie”, pero nadie, humano al menos,…
puede garantizarnos esta predicibilidad,…, esta certeza
que consideramos necesaria,.., “basal”,…

El gran vacío de nuestra ignorancia (inconsciencia),…
resulta ser un universo,..
pero debemos saberlo, eso si,..
y ubicarnos como ese criatura, tan carente de respuestas,..
solidas, integras, completas,…

En verdad que no,…, no las poseemos,…
tengamos pues esa humildad,.., es necesaria,…

¿Y Dios?,…, allí esta, esperando que nos demos cuenta,…