Yo no sabría cómo ocultar una lágrima diva,..
yo no sabría cómo no corresponder,.., empatar,..
allá con el triste viento,.., y con el tiempo,.., y dejarme
arrastrar,..
Casi que no tengo ninguna fuerza,.., ni memoria,.., ni un deseo
ferviente,..
de poseer alguna presea,.., alguna posesión,.., algún sentimiento blindado,..
que siento que nada de ello me pertenece,.., acaso algo de voluntad
para expresarme sutil,.., pero de manera franca,.., y libre,..
Sin saber si algo de ello puede importar,.., le conmueve a “alguien”,..
marginalmente eso no me quita el sueño,..
he aprendido a hablar con los heliotropos,..
con los pájaros, con las aves,.., y los gatos,..
y uno que otro can, de vez en cuando,..
Y he podido algo comprender el mundo,.., a su ciencia,..
y ha calcular diligentemente los espacios del tiempo,.., y sus
pausas,..
y a medir la dimensión humana,.., a sus pasiones,.., su arte,.., su
ciencia,..
y he podido ver a la esperanza,.., en los ojos de los pequeñines,..
Los aun no nacidos,.., y los que ya están,…, aunque se encuentren
enjaulados,..
como pájaros en el dintel,.., queriendo expandir a nuestras
consciencias,..
ojala,.., ojala,…, podamos comprender el susurro de sus voces,..
de sus tristes lamentos,.., oh,..
pobres criaturas,…
Pero más pobres aquellos miserables,.., que los tienen allí,..
cada acto que lesiona a los niños,.., rompe, fractura el tiempo,..
los “valores”,.., el amor,.., y la integridad como humanidad,..
comprendamos,…
