Los enormes,.., los grandiosos gigantes,.., los niños,..
Ciertamente que ellos deben ser protegidos y cuidados al máximo, porque
son sumamente susceptibles de ser abusados casi por cualquiera,.., por sus
propias características muy propias de los niños,.., pero por otro lado,.., es notabilísimo
lo que los niños pueden significarnos,.., y no es para tomarlos como una
referencia netamente utilitaria y pragmática,.., no es así,.., es aprender
notablemente de ellos y su enorme significado,..
Los niños son en esencia,.., esperanza,.., alguien podría decir,.., no
todo está perdido,.., precisamente por los niños,.., ellos significan o
representan la segunda y notable oportunidad que la vida nos otorga para
resarcirnos,.., para recomponenrnos,.., el adulto solo, se crea como un ser lleno
de fracturas y temores,.., rígido demasiadas veces,.., egoísta ídem,.., con
culpas y con constructos terribles y absurdos,.., solo el pequeño no “trae” no “carga”
con todos estos lastres,..
El niño es:
Espontaneo,.., no sabe inventar facetas y rostros preelaborados,.., si
algo siente bueno o malo,.., lo va a expresar fehacientemente,..
Nítido y claro en sus sentimientos,.., igualmente si siente algo por
alguien,.., bueno o malo,.., no lo va a mentir,.., realmente lo va a sentir,..,
el pequeño no admite los dobleces que en el adulto es algo común,.., conocida
como hipocresía y que igual se le llama diplomacia o educación,..
Los niños saben jugar,.., es una de sus cualidades más valiosas e
importantes,.., son enormemente lúdicos,.., y los adultos no,.., a mí en
particular me costó muchísimo trabajo,.., jugar con mis hijos,.., y ahora lo sé,..,
que si yo hubiera jugado con ellos,.., ellos realmente estarían mucho mejor,..
Un niño que juega,.., va a ser un adulto sano,…, casi seguro,.., porque no se
va a tomar las cosas tan en serio,.. Los adultos como lloviznando y amargados además,..,
creemos que las cosas, la vida,.., debe ser dimensionada de tal modo,.., que
hacemos de ella una verdadera tortura,.., porque perdimos esa esencia del
juego,.., todo lo procuramos calculado, medido,.., predecible,.., y lo único que
sacamos es un terrible dolor de cabeza llamada neurosis,.., planificamos
todo,.., todo,.., es terrible,.. La vida es impredecible y solo en el juego
reiterado, podemos llegar a comprenderlo,.., siempre el azar juega mucho en
todas las cosas,.., y debemos aprender a jugar con él,.., y no sentirnos “amenazados”,
“torturados” por la incertidumbre,.., decían en los grupos,.., fe es confianza
y no desafío,.., aprender a ponderar ese azar y no sufrir con ello,.., es el resultado
del buen quehacer del juego,.., y los niños,.., son expertos en eso,.., yo en
ese sentido, tengo que aprender notablemente de esa capacidad aun a esta edad mía,..,
sé que lo debo de hacer,.., que es parte de lo que notablemente me falta por hacer,..
Los niños saben de la esencia del amor,.., se les da natural esa percepción
y concepción,.., no requieren casi de nada para tenerla y crearla,.., son
sencillos, precisos, justos,.., no elaboran grandes teorías, escritos, ensayos
o poemas del amor,.., ellos lo viven,.., lo sienten,.., lo manifiestan
plenamente,.., saben amar incondicionalmente,.., los que ya somos abuelos lo
hemos comprobado con los nietos,.., quizás con ellos,.., porque en mi caso,..,
yo “sufrí” a mis hijos,.., mi condición enferma emocional,.., no me permitió
amarles cómo se merecían ser amados,.., ahora lo sé,.., claramente lo sé,..,
por ello hago votos o petición a un ser mayor a mí,.., la energía cósmica universal
que considero rige todo el universo,.., igual a mí y a ellos,.., que ella les
permita reencontrar al amor, el que esta y reside en todo ser humano,.., porque
igualmente ahora lo sé,.., cada ser humano tiene un alma, aunque esta no le sea
visible,.., el humano la posee,.., ¿y por qué?, es simple la respuesta,..,
porque tiene vida,.. Los pequeñines no tienen que hacer este tremendo periplo o
andanza para comprender esto que me toco a mi entenderlo ya viejo,.., ellos lo
saben perfectamente, los pequeños son unos maestros del amor,.., por eso los
veo,.., los escucho,.., los observo,.., me solazo en ellos,.., son grandiosos,
hermosos todos los pequeños,.., hay que cuidarlos muchísimo,.., todos los
pequeños son unos enormes tesoros,.., baluartes, más que una obra notable de un
artista famoso, son unos ángeles terrenos,.., ciertos,.., reales,.., bellos,..
Creo que con esto ya relevo mi punto,.., los pequeñines,.., pueden ser
nuestros grandes maestros o mentores,.., lo cual no significa que ellos nos
deben de mandar u ordenar,.., ¿eh?,.., debemos de cuidarles para que ellos
evolucionen y no castrarles en sus enormes cualidades,.., creatividad, amor,..,
sinceridad,.., honestidad,.., tales valores que ellos traen prácticamente in
situ,..
Hasta aquí estas notas,..