domingo, 20 de septiembre de 2015

Discurseando,...

Es realmente muy cierto,…
que mis escritos casi siempre empiezan así,..

Como en una “cuita” que se platica, que se comparte,…

Y también es cierto que en definitiva quizás
me falten argumentos y figuras,..
muchas horas de vuelo,
entiéndase lectura de referencia interesante,…

Pero por otro lado me voy empatando con un compromiso,..
no evangelizador, ni de consciencia, es absoluta y completamente personal,..

Que no obedeciendo a ninguna métrica, reglas, formato o una tendencia,..
el compromiso es el siguiente:

Quisiera plasmar mi interés a darle voz al testimonial de vida,…
es un rescate de trascendencia de vida, anhelos, percepciones,..
sueños, ideas y creencias,..

El trabajo mío quiere establecer un compromiso, una interlocución,..

Quisiera “rescatar” si se puede elegir la palabra,…
la imagen nítida real del ser humano,…

Alejarlo un tanto de los supuestos,.., de lo debes de,…
de los tienes que,…

Sino más bien, rescatar al ser humano cotidiano,…
lejos de la parafernalia de las ideologías,..
preceptos morales, estereotipos,…

Porque en verdad que siento,…
que allí radica la clave,..
para dar un verdadero giro a la literatura,..

En realidad acercarla al personaje real y no ficticio,..
a nuestra “otredad”, pero que a final de cuentas es nuestra
real y nítida esencia,..

Esa que muchas veces negamos y evitamos,
(por no querer ser unos “loosers”)
que no queremos enfrentarnos,…

Y estoy seguro que esa es la gran falacia,..
que nos evita el ser mejores,…

Estoy totalmente convencido de que
al podernos ver clara y nítidamente,..
de aquí nacerá un amor sumamente esplendoroso,
de este hermosísimo encuentro,..
de nosotros mismos,…

Que ya alejados de este especie de misticismo,
de esta acendrada y terrible negación,..
de nuestro claro valor como personas y como seres humanos,..

Nacerá de allí una certeza y una fuerza enorme de ser humano,..

¿Por qué lo digo y afirmo?,..
porque muchas veces, así me ha tocado,…

Que en base a las figuras o estereotipos o
prejuicios hacia mi persona,..
es que yo he actuado o no actuado,..
obedeciendo o empatando ha con ellos,..

Que si eres viejo, que no debes ya enamorarte,..
que ya no debes de soñar, que has fracasado tantas veces,…
que no te tengo confianza, que tú mismo no te tienes,.., etc, etc,..

Y en este breve discurso,
sólo estoy plasmando esta inclinación y sentido propio,..
esa renuncia a ese precepto, si es una ruptura,..
de los cartabones, los prejuicios en que yo caigo,..
de mi mismo, de la vida propia,..

Y creo que por hoy, cuento con este hermoso recurso,..
(la literatura)
el testimonial de vida, o lo que quiero ser (anhelar),..
fidedigno, real, discursear conmigo mismo,..

“Rescatar” y verme nítidamente,…
es mi anhelo y compromiso,…
lo quiero, lo anhelo,..
ese es mi gran tema,…

Y no me niego el tocar otros que me inquieten,..
que no,…
seguiremos discurseando,..

Y esta pretensión,..
de ninguna manera invita a restringir,..
lo lúdico, la invención, la fantasía, el anhelo,..
y cualquier manifestación que el alma pretenda,..
pues, ¿quién sería yo para delimitar la voz y la palabra?,..


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