a la locura, a la alta pasión, pues no concurrimos a la distopía,…
somos solo seres “marginales”,…, “neutros”,…
y “conciliamos”, establecemos un dialogo, la “negociación”,…
un toma y daca,…
tú me das dinero (o algo así) y yo te doy mi alma, mi vida,…
el “eterno” juego,…
Mi arrogancia,…, mi destino y voluntad, ellas te pertenecen,…
los seres que no pueden someterse, son seres extraños, extravagantes,…
y el “vulgo”, la mayoría, les consideramos locos, “apartheid”,…
“vagabundos” de la ciencia o de cualquier verdad o rama conocida,…, gnosis,…
hecha, estructurada ella,…
que pertenece a un “nos”, la “sociedad”, lo que ello signifique,…
donde ella se erige, y que se construye con suma arrogancia,…, y con candidez también,…
En un mundo Plancarte,…
plano o tridimensional,..
ya en verdad que no nos importan los
pensamientos o sentimientos abyectos,..
en nuestro paladar,…
Casi que ningún malestar,…
pudiera tener “vigencia” o elección,..
lo mismo da la vida o su ausencia,…, o su falta de,…
No importan las pasiones, ellas son fuegos de artificio,…
son “entretenidas” los dueños dicen,..
los titiriteros del mundo, el “gran hermano”, llevan su obra,
su parodia al 100,…
Y las almas pequeñas, dislocadas, solo sufren sus consecuencias,…
su hacer o su tedio,…, su “arte” o su maldad,…
Ah, pequeña humanidad tan solitaria,…, tan extraviada de sí misma,…
nos hemos acostumbrada a la “barbarie”,…, al no amor,..
a la vida, a la muerte dar el mismo “valor”,…
oh,…
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