Majo,...

Caray que cosa es esta de escribir,…
de formular universos,…, sueños e ilusiones,…
¿y la realidad, donde queda?,…, sabe, dirían en Guanatos,…
hay mil formas de “evadir”, las cosas, el bulto,.., la vida,…
sus consecuencia y lo que pudiera ser lo exigible,
la “verdad” que todos esgrimimos, casi sin vergüenza,…
aducimos que ella nos pertenece,…
y somos los únicos dueños de esta verdad irrefutable,…
así pues los humanos,…

(esta disertación la tuve en la mañana, quizás no
tiene ningún sentido, pero no quise dejarla al margen)


Majo, pequeña niña (para mis años, lo eres),…
¿qué pudiera decirte que fuera un regalo?,..
créeme que solo he podido albergar, poseer,..
esta “diarrea” de palabras, de argumentos,…
y quizás más de uno en la familia habría podido
concebir que era un cierto “rasgo” de locura,…
de acuerdo estoy y no he de rebatirle,…
nada, ni una coma,..

He sido demasiado sedentario, ¿por qué?,…
ya no me lo cuestiono demasiado, ya lo asumo
con un tanto de resignación, ¿vale?,…

Pero Pepe (así siempre le he dicho), fue siempre especial
de muchas maneras, ya lo he escrito en otros pasajes,…
su gran nobleza y su corazón, su fe que él tenía en algo,…
que igual ello se traducía en terquedad o necedad,..

Tenia una valentía y fuerza como el Quijote,…
el luchaba con molinos y con fuerza,…

A mi me quiso componer, a chingadazos y claro
que no pudo,…, pero mi cariño y respeto siempre está,..
por su querencia,…

El y yo fuimos o quisimos ser “lideres” en la casa,…
evidentemente no pudimos “arreglar” los entuertos,…
pero mi carnal, nunca cejo en su intención,…
donde el se ponía, buscaba “arreglar” los asuntos,…

Y por otro lado, igual el me demostró muchas cosas,…
que yo no hubiera imaginado tener,…
lealtad, confianza en mi,..
nunca bajo sus calificaciones para conmigo,…

Te cuento solo un pasaje,…
cuando yo salía de la superior, yo sabía que debía un bonche
de materias, no recuerdo cuantas, con eso te digo todo,…
y el proceso de la graduación seguía su curso inexorable,…
yo hubiera querido que algo pasara, un milagro, “algo”,…
y claramente esto no paso, se llegó la fecha,…
mi padre me compro un traje bien chido,..
y los boletos,…, todo, todo bien,..
pero en mis sueños (pesadillas), yo creía que alguien decía desde
el estrado: “Victor Clavellina, no tiene diploma”,…, o algo así,…
padecí las de Caín y no, todo sucedió “normal”, recibí mi diploma, me tomaron
la foto de grupo, pero yo estaba sumido en una especie de sentir,
¿cómo calificarlo?,…, no sé,..

Que yo no me merecía todo esto, mientras que veía que mis compañeros
todos, estaban contentísimos,…, tu padre, mi hermano, hablo conmigo
cuando llegamos de la graduación,…

Y lo hizo, ¿cómo?, como ya te la sabes, con lágrimas en los ojos
y decirme (mas-menos), “carnal, yo estoy sumamente orgulloso de ti,…
no desconfíes de tu merecimiento”,…, ¿qué te digo?,…
no sé si llore por sus palabras sinceras, próximas,.., demasiado intimas,…
y agradezco ello como no te des una idea y hoy en este día te lo comparto,…

Felicidades mi pequeña,…, se feliz, procura serlo,.., abrazos,…