En este mundo convulso, rodeado de paradigmas y desastres amplios,
diversos, variados, ya es tiempo de cuestionar las “estructuras” que han hecho
nuestra sociedad moderna, actual, lo que es ahora. Algunas son sumamente
importantes y nos han delineado como naciones:
la economía, la religión, la política, la cultura, la comunicación, la
justicia, la ley y habremos de comentar algo al respecto, con el consabido, “es
una mera y particular idea o percepción y es algo inconcluso no acabado”, no se
consideran respuestas absolutas, totales y categóricas al respecto de, bueno, comenzamos.
La economía
Ha tenido muchas acepciones y elementos que la han venido conformando,
la ley del mercado (oferta y demanda), el “valor” del objeto, en sí mismo, (concreto
o subjetivo), los modelos económicos, los mercados, etc., de tal suerte que en
la actualidad en cada país del mundo, vemos una enorme simbiosis y afectación
(en el más amplio sentido) global, que lo que sucede o impacta a un mercado en
cierto lugar del mundo, tarde que temprano, “afecta” o repercute en otro estado
o nación y esto se ha venido demostrando con los ejemplos más recientes:
Italia, Grecia, China, el precio en picada del petróleo, vemos entonces cada
vez más, un mundo totalmente intrincado en su economía, difícilmente podemos llegar
a creer y considerar que “algo” que pueda estar sucediendo en alguna parte del
mundo no nos afectara, tarde que temprano y esto ya es una realidad inminente y
que no puede obviarse o no tomarse en cuenta, la economía de los estados es
“global” y como tal se tiene que ver, estudiar y analizar, para de allí partir en
su desarrollo. México ha tenido, para bien o para mal, ligada su economía con
la de USA, es innegable este hecho, son demasiados años de esta simbiosis, no
importando que haya habido tratados o no, la economía mexicana ha ido muy
ligada a la de USA y no se diga además de todos los demás elementos que también
pesan en esta trabazón económica, los ingresos que México tiene por los envíos de
dólares de los mexicanos radicados en USA, el mismo empleo que tienen y
devengan todos estos ciudadanos en USA y que de no estar allá, en México, el
gobierno tendría que lidiar con ello (más de 23 millones), mucha de la economía
y desarrollo nacional se ha visto influido o imbuido por esto mismo, vale
mencionar la industria maquiladora desarrollada, cerca de la frontera con USA,
los mismos puertos marítimos ubicados estratégicamente para desarrollar “debidamente”
este intercambio comercial, hay quien ha dicho de México y su relación con USA,
que México es el patio trasero de USA y ciertamente la geopolítica y la
historia, así lo han demostrado, gran cantidad de lo que acontece en la política
y la economía mexicana, tiene que ser auditado y evaluado por USA, los
recientes ajustes de las diversas reformas económicas, bien pudieran creerse que
obedecen a ello, fortalecer al “socio comercial” mexicano, no obstante, sin
embargo, en un momento dado, los dineros no son totalmente “fieles” y llegado
un momento extremo de locura (José López Portillo: “defenderé al peso como un
perro”), simple y tranquilamente estos capitales, se van, se vuelven “golondrinos”
y buscan mejores mercados que les garanticen mejores utilidades que el nuestro,
de allí la gran debacle que ha acontecido en algunos cambios sexenales
recientes. México, en la actualidad, no podría independizarse de esta tutela
atroz de USA, ¿por qué?, hay infinidad de razones, la deuda contraída con el
FMI y similares, la balanza e intercambio comercial con USA, los envíos de dinero
de los connacionales hacia México (que se verían afectados con una fuerte acción
expulsiva de los migrantes), la economía mexicana petrolizada (contrario a lo
que diga Peña Nieto) y que hoy por hoy, USA es uno de los principales clientes.
México tendría que hacer grandes ajustes para modificar esta enorme y deforme
simbiosis con USA y con el mundo en general, habría acciones de corto, mediano
y largo plazos, dentro de las primeras, aunque llevaran mucho tiempo aplicar
seria, cambiar el modelo económico que se tiene en la actualidad, se tiene que
romper con la creencia de que el “bienestar” debe obedecer al modelo económico consumista,
donde lo más valioso e importante es, “cuanto tienes, cuanto vales” y forzar a
los ciudadanos a esa carrera obsesiva de la posesión de objetos perdurables y
de corta duración, que esa es la medida de felicidad y éxito, poseer mas y mas,
esta percepción occidental, cien por ciento, debe ser modificada, lo más rápido
posible, ya que ahora estamos siendo testigos de esta enorme voracidad, que está
acabando nuestro planeta y que de no corregirse, esto derivara en un verdadero Armagedón,
¿cuál será el nuevo modelo de producción que deberá seguirse para las
sociedades post-industriales, tal como las conocemos actualmente?, realmente es
difícil saberlo, tendríamos que cambiar demasiadas cosas y desaprender muchas
tantas mas, un elemento por ejemplo que tendríamos que atacar rápidamente, sería
el reciclaje, a nivel mundial, no solo en los países avanzados (que algunos de
ellos ya están adelantados en ello), sino en todos los países, a nivel mundial.
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