de la tinta de mis ojos,…
De una espina que tuviera en ellos,…
de una mano poco ágil,…
de una mente atormentada,…
que no pueda vislumbrar,…
De un corazón de piedra que ya no pueda palpitar,…
y de perderte entre las penumbras de mis fantasmas,..
ya no verte, ni oírte, ni siquiera delinearte,…
una sola línea,…, una curvatura,…
Percibir a tu calor que irradias,…
y perderte,…
No te mueras corazón,…, mi alma clama,…
solicita,…
que ese don,…, que tu sonrisa no se pierda,…
y esa luz,…
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