Invitarla por un tiempo frugal acaso,..
a abrazar un poco las orillas de mi miedo y de mi luz,..
“destellos” que también ellos aparecen,.., florecen,..
Y espero ser suficientemente paciente,..
para poder encontrarnos en el más allá,…
del encuentro fortuito de besos y caricias,..
Para luego en bendecida y dulce paz,…
en que las almas ellas suelen estar,…
mas juntas e intimas,
ellas,…, fundidas logren, conjuntas estar,..
Para poder besar sus laureles y las lagrimas
que ellas no se deseen apagar,..
Y habré de conculcarle a tener paciencia y piedad,..
para que no “nuble” innecesariamente,..
el poema de nuestra amable y dulce unión,..
Sin obstar que los temores sean demasiado grandes,..
categóricos y las diferencias también,..
Conjuntaremos alma, vida y cuerpos,..
como si en ellos se nos fuera la vida,…
y también el alterado corazón,..
Yo os invito,..
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