lunes, 15 de julio de 2019

Sobre las musas,…


Hoy se me da la gana de escribir acerca de ello,.., pero ¿Por qué?, ¿acaso es para dar una cátedra o enseñanza al respecto?, realmente no es el caso o pretensión, sino que más bien sería una especie de “quid o recurso” empleado al menos por mí,..

Yo les encuentro en cantidad de cosas, la “musa o el muso” nada que ver con su definición griega,.., para nada,.., la “inspiración” para escribir, alguien diría “consciencia” o estado alerta o perceptivo de las cosas, yo no diría tanto, y más bien sería una especie de mantener un conducto libre, que he procurado exista, sea, busco entonces escribir de lo que sea o persista, o se me vaya presentando o apareciendo, ¿Dónde?, en todos lados, una noticia, un evento, música, un recuerdo, etc., por ejemplo antier, por mirón vi una pareja fallecida en la calle, al parecer chocaron en moto con un camión urbano, y quedaron lastimosamente tendidos en el asfalto, fue terrible esa imagen,…, difícil olvidarla,…, NO PODRIA, por eso tengo que decirla, para de alguna manera ella no me abata, me postre,…, y una frase se me vino respecto a ello,…, “ya no llegaron a,…”, me dio mucha tristeza,…, pero es que me pasa, hay imágenes que se me quedan de por vida,…, ellas son mis musas y musos,.., “ellas” me concitan, me invitan a decir, a plasmar “algo” de ellas, a decir, expresar necesariamente, todo el tiempo, siento ello, esa necesidad,.., ¿Dónde?, en el camión, viendo a alguien, leyendo algo, al escuchar música, al ver un video, etc. etc., y hay temas que siempre tengo presentes, la política en México, la familia, los hijos, el arte en general,.., etc. etc. Las “imágenes” realmente me “forzan” a hablar de ellas, no requiero casi nada de esfuerzo, para pensar en ellas, solas me dictan lo que debo decir, acaso solo yo dejo que lo hagan, no las inhibo en absoluto,.., les dejo,..

He igual he visto que hay quien cree que la poesía o escribir es un ejercicio cuasi, cuasi científico, escoger el tema, el discurso, las palabras y como eslabonarlas, cuidar su elección y su acomodo, su mensaje final, textual o tácito, o el trasfondo, algo así como un plano arquitectónico del alma y sus entramados, y en mi experiencia, ello así no sucede, la única voluntad que pongo, lo reitero, es sostener el lápiz o el teclado y dejar fluir a las ideas, las palabras de manera libre, no sujeta a nada, que ellas surjan solas, sin casi llamarlas,.., cualquier cosa que aparezca, NO ABORTARLE, todo es valioso, importante,.., no excluir nada,…

Hasta aquí estas notas,.., abrazos,..



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