Seguir la vida,..

Hay que estar muy posiblemente,..

hasta el límite,…, casi en la raya,.., los linderos,..

Entre la razón y la locura,.., entre el amanecer y un posible ocaso,..

entre la lagrima y una sonrisa,..

para poder comprender, o algo sentir,..

Ese dialogo perverso de nuestro interior que busca espetarse,..

presentarse,.., decirse,.., si yo estoy aquí,.., no me niegues,..

no me renuncies,.., ¿extrañas?,…

Si y mucho,.., una rosa pálida,..

una risa cálida cada mañana,..

Un dialogo amable,.., un tener algo que decir,..

a alguien,..

Sentir la ternura en el corazón,..

al poder apreciar los ojos de un bebe,..

Y esperar en cada día,.., ese saludo,.., pero real,..

buenos días Don Víctor,..

No obstante, es claro que la vida no se construye de supuestos,..

cosas mal dispuestas,.., ellas no son,.., piedras para construir nuestros días,..

nuestro camino donde transiten nuestros pies,..

vaya que sí,.., delucion,..

simple y rampante,..

Hay que formar carne,.., materia,.., sonidos,.., tacto,.., pelea,..

porque la vida nos exige,.., aunque queramos renunciar a ella,..

no nos lo permite,.., ella nos dice, nos reclama,.., ¡adelante¡,..