Como de verdad es que no quisiera,..
ya seguir agotando, entristeciendo a la bella palabra, tierna,..
esa que languidece en la tenue escarcha del frio de invierno,..
aquella que pudiera volar en frágiles papalotes,..
que ella emergiera como un leve suspiro,…
Que ella cantase,…, y su sonido me elevara,..
y que me llevara,.., abandonara,..
Como en verdad yo quisiera no hacer mas caso,..
a esas caritas tan tristes, que me recuerdan a mi lejana infancia,..
mandalas, las canciones de los niños querientes,..
cantantes,.., musitantes,..
soñadores, anhelantes de promesas tan claras,..
Parece que quisiera cerrar a los ojos y no verlos,..
sellar a mis oídos, no escucharlos,..
pero no puedo,.., de verdad que no puedo,..
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