domingo, 5 de julio de 2015

Curación del alma,...

¿Cómo restituir, curar un alma?,...
¿como soliviantarla, elevarla, alentarla?,...
¿es que acaso puedo, debo?,...
¿no es acaso potestad que no me pertenece, que no es mía?,..

Curar el alma, como si fuera una artística obra,...
lo que yo he visto primero,...
es reconocerle, es ver, definir cada uno su propia alma,..

Mi alma quisiera fuera un risco, un peñón de Gibraltar,...
como una consagrada espada, inquebrantable, templada,...

Pero no,..., cada quien debe percibirla,..., delinearla,..., a su alma,...

Y mi alma es como un pajarillo, como una lánguida ave,...
que apenas vuela, que acaso apenas aletea,..., y se eleva,...
o se deja caer en picada, se abandona,...

Es harto, demasiado sensible que percibe,..., el aletear de una mariposa,...
un murmullo, el silencio, la quietud, ella percibe,...
como dos ojos, apenas abiertos, en la densa obscuridad de la noche,...
que escucha y traduce el tremolar de otras auroras,...
¿será renuncia?,.., ¿será un sueño adormilado?,...
una negación, ¿ante la plena realidad que le circunda?,...
quizás un sueño,...

Alma mía, diletante, yo te tomo con mis manos,...
y deveras os insuflo, un cálido aire, y te conmino a que suave,...
vueles, te destierres, de esta magra realidad que tu sostienes,...

Alma mía, por favor ya canta,..., y si no puedes, al menos escucha,...
el silencio y las pausas, conque pulsa el universo, constelaciones,..
deveras que vibra, se expande y se contrae, como rítmico corazón,..
muy enorme,...

¿Necesaria la humildad, bajar los ojos, expectativas?,..
si pues, ¿que nos queda?,...
¿como ello, la vida acaba, concluye, se termina?,...
alma mía,..., tranquila, tranquila,...



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