miércoles, 26 de marzo de 2014

Dicotomia

Voy dándome cuenta ahora, que,..
han ido coexistiendo en mi dos entidades,..
la anhelante, es la que escribe casi siempre,..
y por otro lado la real, esa que percibe toda mi gente,..
ese rostro que me ven todos los días,..

¿Cómo fue que nacieron?,..
en verdad no sé cuando fue el día,
en que resolvió mi alma dividirse,..
pero definitivamente se dio esta dicotomía,..

Quizás fue expoliada por la incapacidad añeja,..
de no poder cambiar a mi entorno,..
desde tiempo inmemorial,..
desde los azules días de mi infancia,..

Teorizo, en verdad teorizo,..
desconozco,..

Tan sólo recién ahora me veo en el espejo
y puedo mirarme de frente,..
y descubrirlas,..
allí están,..

Quisiera facultar la posibilidad,..
de integrarlas,..

¿Será posible?,..

Creo en ocasiones anteriores quise hacerlo,..
de manera intuitiva,..

Más al no saber conscientemente el ejercicio,..
los resultados eran muy fortuitos,..

Podrían desbarrar en pésimos resultados,..
ubico tan sólo uno significativo,..
cuando me enamoré de mi esposa,..

Estas entidades parecen tener vida propia,..
y voluntad,..
se manejan solas, no me piden permiso,..

Recién ahora la entidad anhelante se manifiesta,..
clara y abiertamente, con mi anuencia,..
y me agrada sobremanera,..

Pero a esta parte, le pesa su correligionaria,..
esa parte tan indiferente, que apenas balbucea,..
esa parte que dio configuración a mi rostro,..
ya al rictus, el entorno todo mío,..
que perciben aquellos que logran verme cara a cara,..

Esa persona tan indiferente,
que pareciera no transita el aire alrededor,..
y que la luz se pierde en ella,..

Fue como un hábito, como una respuesta nefasta,..
a la “indiferencia” ya de mis pares,..
una especie de “revancha”, ya verán, ya verán,..
no me atienden, no me siguen,..
ya verán mi indiferencia,..
que loca respuesta,..

En verdad espero,..
ahora,..
que se den la mano,..
ya que no puedo desparecerlas,..
sería como un hara kiri,..
algo funesto,..

En verdad espero,..
el lograrlo,..


No hay comentarios.:

Publicar un comentario