jueves, 10 de junio de 2021

Una dama grande,…

En el dulce silencio de tus ojos caídos,…
moran tantas cosas,…, recuerdos agridulces,…, o aquellas nostalgias,…
que nunca han de volver,…

Personajes que no se sabe si existieron,…
o que solo tu lograste forjarles,…, crearles,…
darles una investidura y un tono,..
y un dialogo e “ideas”,…, perversión o su contrario,…

Y es así que logramos crear fantasías y fantasmas,…, nigromantes,…
amantes o seres perversos desde pequeños o sencillos o anodinos
seres,…, los humanos,..

Sus dimensiones casi siempre, (las nuestras),…
casi que no se acercan a una realidad,..
no somos ni “santos”, ni eruditos,…, ni tan siquiera perversos o viles,…

Pues carecemos,…, de la real maldad,…, de aquella planeación perversa,…
o tan sólo del entusiasmo o la fuerza, o la resiliencia o la constancia,…
o fijación en las ideas,…, necesarias para las grandes obras o constructos,…

“Somos” casi flojos =lacy,…, inconstantes,…, “chimoltrufios”,…, o suaves, o blandos,…
casi en todo,…, no somos tan de hierro como la dama, la Merkel,.., esa,…
que tenía una regla siempre en todo,…, y nunca la rompía, nunca,…
y vivía acorde totalmente a ella,…



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