Pudiera acallar a
mi voz,..
quedarme en
silencio, pudiera,..
Cerrarme en
ostracismo como lo he hecho,..
tanto tiempo,…,
una vez más,..
acabara,..
De hecho es mi
historia permanente,..
ser “casi”
persona,..
no ser, no
existir,.., pudiera,..
¿Que muevo las
fibras morales?,..
el alma,..
¿qué remuevo algo
en el interior de mi par?,..
que le revuela en
el pecho, corazón,…
le agrede en
algo,..
Repuntar sobre
esas premisas,..
encontrar una
verdad superior,.., superlativa,..
es la justicia de
guarecer el don de la palabra,..
de la voz,.., no
acallar,..
Es encontrar el
espacio en que se constriñe el alma,..
dejarle
expandir,.., que es su derecho, divino es,..
de ello si estoy
obligado,.., forzado por consciencia,..
Pero si debo
evitar, el ”forzar” mi lectura, mi pulsión,..
eso sí, cada quien
establece su lectura, su medida,..
su ritmo, su inclinación,
vibración,.., su quehacer en el alma,..
su mirada,..
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