quisiera susurrar levemente
tan sólo,…
desearía escuchar
el sonido pleno del silencio,..
afilar todos mis
sentidos,..
estar en plena
disposición,..
quisiera poder
percibir,..
el suave vuelo del
colibrí,..
el vuelo rasante
del pelicano,..
el clamor de mil
suspiros de amor,..
que en lontananza
se van dejando,..
por saldo de su
bendición y de su anhelo,..
Quisiera el reencontrarme
conmigo mismo,..
aproximarme,..,
poderme ver, ya tocarme,…
abrazarme,…
solicitar,..
el pleno perdón
para mis faltas,..
la bendición de
una lagrima postrera,..
el reencuentro con
todos mis seres,..
la oración y
bendición de los ausentes,..
ya por fin apaciguarme,..
No es tan
necesario tanto, tanto,..
tan sólo aquietar
a mi corazón,..
sosegar a mi
espíritu,..
verterlo como en
una jarra,..
para poder
separar,..
las partes que
sobrenadan,..
aclararme,..
Bregar si quisiera,…
remontarme,..
plegarme hacia el
reencuentro,..
de ese punto
primigenio,..
en el que me fue
susurrado al oído,..
mi destino,..
cuando empecé a
vivir,..
al emitir el
primer sonido,..
ese llanto que
rompió todo mi silencio,..
y empecé a
respirar,..
todo mi ser se
abría camino,..
¡para vivir!,..,
¡para vivir!,..
Cuanto amor hay en
ello,..
oh mi Dios que
enorme gracia,..
¡el poder hacerlo!,..
abrir la ventana y
empezar a ver el color,..
sentir el calor,
el frio,..
una mirada de
tierno amor,..
el roce de una
suave piel,..
¡oh Dios gracias!,..
por tanta
magnificencia,..
por tu enorme
caridad,..
por permitirme
razonar,..
por poder
articular una palabra,..
Ser de plena
luz,..
que no
requieres,..
de nada de
Gloria,..
pues eres toda
ella conjugada,..
que no requieres
de sabiduría,..
pues eres el
máximum de ella,..
inalcanzable,..,
para la criatura humana,..
Bendito seas,..
tan solo humildemente
os lo pido,..
ser magnánimo,..
que no me
abandones,..
que no me aleje de
tu sendero,..
y de tu mano,..
de tu luz y de tu
gracia,..
arrópame,
abrázame,..
y no me dejes
ir,..
no me permitas que
me pierda,..
que me extravié de
tu senda,..
y tu camino,..
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